“¿Cómo puede el joven llevar una vida íntegra? Viviendo conforme a tu palabra”. Salmo 119: 9 N.V.I.
En el versículo en mención podemos apreciar de manera muy clara como el salmista nos entrega una respuesta muy importante y fundamental para el ser humano del siglo XXI, a la pregunta ¿Cómo puede el joven llevar una vida íntegra? .Y la respuesta no puede ser la mejor por parte de Dios, viviendo conforme a su palabra, dicho de otra manera, obedeciendo todos los mandamientos que se encuentran escritos en las Sagradas Escrituras.
El término integridad está íntimamente relacionado con el concepto de ética, porque la integridad tiene que ver con el comportamiento y la conducta que todo ser humano debe mostrar cómo ser ético y justo en todos los escenarios de la vida.
La palabra ética proviene del vocablo griego “ethos” cuyo significado es relativo a las costumbres, comportamientos y hábitos.
La ética es considerada como el conjunto de normas morales que regulan la conducta humana. El problema en la época actual es que la moralidad es relativa.
El postmodernismo se ha caracterizado por el relativismo en los conceptos éticos y morales por lo que ya no hay una escala de valores establecida; ahora cada quien fabrica su propia moralidad y cada quien queda a merced de su propio arbitrio.
El relativismo conduce al peligroso subjetivismo que lleva a una persona no a buscar la verdad en Jesucristo sino afirmarse en “su propia verdad”. La cultural actual se resiste no solo a declaraciones de verdad cristiana sino a cualquier declaración de verdad. El posmodernismo rechaza cualquier noción de una verdad absoluta y universal, y reduce todas las ideas a construcciones sociales que reciben forma de acuerdo a clase, sexo y etnicidad.
El gran peligro del relativismo es que cada principio queda reducido a una preferencia personal. El relativismo es una actitud subjetiva en la que cada persona decide lo que es bueno o malo según su propia conveniencia, todo “depende”, no hay absolutos. En contraste, el creyente en Jesucristo, cree en un Dios que ha hablado y ha revelado un estándar absoluto e inmutable de lo bueno y lo malo, un estándar que está basado en su propia santidad.
Hoy en día los jóvenes por ejemplo de mi amado país “Colombia” han perdido los valores morales, la ética, la integridad, también hoy en día la competencia nos enfoca a tomar decisiones morales. La juventud de hoy ha basado su ética y moral en una sociedad que ha rechazado la ética bíblica. Por eso no debemos aterrarnos, estimados lectores con tantos abusos morales en todas las actividades como el deporte, el estudio, el trabajo, la familia, etc.,
La Ética es una palabra que ha perdido su significado hoy en día en el hombre del siglo XXI
Cualquier persona puede decir que es ético, sin importar su nivel de integridad. Por ejemplo muchos afirman que el deporte construye el carácter, pero en realidad el deporte REVELA el carácter de cada individuo. Las reacciones revelan quienes somos en verdad, nuestro carácter.
Ética es pensar correctamente acerca del bien y del mal basado en la verdad suprema dada por Dios en su palabra.
La humanidad actual debería considerar muy en serio la advertencia dada por el profeta Isaías: “¡Ay de los que llaman a lo malo bueno y a lo bueno malo, que tienen las tinieblas por luz y la luz por tinieblas, que tienen lo amargo por dulce y lo dulce por amargo!”.
Mario Humberto Garzón Melo
Estudiante LOGOS