El precursor de la inteligencia emocional Daniel Goleman se enfoca en el desarrollo de cinco áreas que acompañan la inteligencia emocional, que son: la autoconciencia, la autorregulación, la motivación, la empatía y las habilidades sociales. Según Goleman la inteligencia emocional en un buen líder es un componente clave ya que la persona puede tener habilidades y destrezas, pero estas solamente lo podrán llevar hasta cierto nivel.
La autoconciencia y la biblia. Según el centro de estudios de psicología online la conciencia consiste en entender nuestras emociones, sentimientos y reacciones ante ciertas situaciones, pudiendo tener un mayor control sobre nosotros mismo. San Agustín escribió lo siguiente: “Cómo puedes acercarte a Dios, cuando estás tan lejos de ti mismo?”, y oró: “Señor permíteme conocerme, para que te pueda conocer a tí.” Absolutamente nadie puede conocer a Dios, si primero no se conoce a sí mismo. Este punto es bien importante ya que la Biblia nos hace la advertencia que debemos tener cuidado de nosotros mismos. 1 Timoteo 4:16 “Ten cuidado de ti mismo y de la doctrina” Este mensaje de conocerte a ti mismo y tratar de elevar tu propio nivel de conciencia es normal escucharlo en muchos ambientes. En nuestro desarrollo personal constantemente debemos evaluar y evaluar nuestras metas, propósitos y acciones. Estoy de acuerdo que la conciencia puede ayudarnos a reflexionar pero no puede provocar un cambio en la persona a menos que haya otros factores que entran en juego.
La autoconciencia de acuerdo a Goleman le brinda una seguridad a la persona de manera que puede reírse a sí misma de sus errores, lo que les permite hablar de sus fracasos como problemas y sin tratar de ocultarlos por lo tanto aceptan una crítica constructiva, por el contrario las personas que tienen baja autoconciencia toman las críticas como amenazas o bien como una señal de fracaso o debilidad. Cuando una persona es segura de sí misma tiene una alto nivel de franqueza que debería ser una gran cualidad para las empresas, pero por el contrario esto se toma de otra manera, ya que cuando una persona dice No, se ve como una negatividad, pero en realidad la persona conoce sus límites y esto le permite enfocarse en sus fortalezas.
En el caso de autorregulación la persona puede mantener un buen control sobre sus acciones y poder pensar su táctica en lugar de actuar súbitamente. Los líderes coléricos tendemos a querer resolver todo inmediatamente y dar opiniones, pero un buen líder autorregulado tiene la capacidad de poder esperar el mejor momento para dar una lección. El líder sin autorregulación podrá activar su respuesta inmediata, pero no tiene la capacidad de poder medir el resultado inmediato y tiende a explotar o bien tratar de dar una solución a una problemática, que aún no ha sido explicada completamente por lo tanto su respuesta será inconclusa y muchas veces los oyentes tienen a no desear compartir toda la información relevante al caso.
Aparentemente las señales de la autorregulación son fáciles de ver; propensión a la reflexión y la contemplación; comodidad con la ambigüedad y el cambio, e integridad, la capacidad de decir no a los impulsivos. El poder detenerse, pensar y analizar en el momento oportuno es clave para que una persona pueda tildarse de autorregulada, el poder decir no a las distracciones y a las oportunidades, pero sobre a los impulsos es vital, para que un líder pueda tener un buen control y otros puedan depender de sus acciones.
La motivación es un factor importante en la capacidad de un líder para mover la visión y la misión de una organización ya que le permitirá alcanzar las metas que se ha propuesto. Cuando una persona fracasa tiene dos opciones o bien puede rendirse y dar por cerrado el caso o por el contrario se arma nuevamente, aprende de la situación y se lanza con mayor determinación en poder lograr lo que se había propuesto. Una persona motivada es persistente y tampoco es fácil de persuadir a que se detenga, de hecho toma cualquier situación negativa para buscar algo positivo que le permitirá afirmarse en su meta y lograr sus fines. La motivación en una persona le lleva a invertir su tiempo y energía de una manera que otros pueden verlo, pero sobre todo pondrá metas altas y no se conformará con sistemas de fácil alcance sino que buscará siempre poder llegar más alto que otros.
El punto de Goleman respecto a la empatía es muy válido ya que en algunos ambientes como iglesias, ministerio o organizaciones sin fines de lucro se ve bien, pero en campos de competitividad y de alto rendimiento en los negocios la empatía no es algo que se ve como una buena cualidad. Esto se debe a que se trata de enfocar en los clientes, pero de acuerdo al escritor en realidad debe enfocarse en los empleados, tomar en consideración los sentimientos de los empleados especialmente en la toma de decisiones importantes. Las personas necesitan que sus líderes tengan empatía ya que los tiempos en que estamos viviendo son muy complicados y globalizados.
Necesitamos poder comprendernos y aceptarnos. No hay duda que una persona empática, tiene la facilidad de poder llegar a otras personas fácilmente ya que se pone en sus zapatos. El mundo en que vivimos hoy es un mundo muy egocéntrico donde las personas solamente están pensando en si mismas y no necesariamente el bien general sino solamente en su propio bien. Esa es la realidad laboral que estamos viviendo en Estados Unidos, no hay lealtad al trabajo, sino al dólar, si me pagan mas me voy, si me tratan mal, me voy, si me dan mucho trabajo me voy, por lo tanto es difícil para un líder tener empatía hacia un grupo de personas cuyos intereses no son de la empresa ni de la organización sino por el contrario intereses propios. Es aquí donde un buen líder tratará de inculcar en las personas un sentido de pertenencia hacia un bien común de manera que haya interés para ser parte de una organización o ministerio que tenga metas claras.
En conclusión las personas tienen que autoevaluarse para determinar sus destrezas, dones y talentos pero sobre todo poder enmarcar sus habilidades y reconocerlas para poder seguir creciendo y sobre todo para que sus empresas u organizaciones crezcan juntos a estos. Las habilidades sociales son extremadamente importantes en un líder ya que estás le permitirán crear o construir puentes que más tarde podrán utilizarse ya sea en beneficio propio o de otros. Un buen Líder no busca a las personas para beneficiarse a sí mismo, sino por el contrario su misión es lograr que otras personas sigan una visión clara y que realicen el trabajo que él no puede hacer solo, pero que tendrá grandes beneficios para todos si se logra alcanzar.
Todas las combinaciones de la inteligencia emocional son importantes ya que como todo carpintero que sabe usar sus herramientas, debe conocerlas y saber utilizarlas con el material correcto. No se puede tampoco desligar una de la otra ya que se complementan así mismo, un líder sin motivación, como puede ser apasionado y un líder sin empatía cómo puede identificar situaciones en las que necesita poder guiar a su equipo de manera cordial y firme. Este estudio sobre la inteligencia emocional necesita filtrarse a través de la Biblia ya que Jesús era un hombre con mucha empatía lo podemos ver en su relación con sus apóstoles, las masas, sus discípulos, los colectores de impuestos, fariseos, saduceos, mujeres y niños.
En muchas instancias habló directamente a este grupo sin juzgarlos. Por otro lado podemos ver a Jesús motivando a sus apóstoles, siempre guiándolos hacia un camino futuro, confiando en ellos y en los tesoros del cielo. No hay duda que cuando analizamos a un líder a través de este lente de la inteligencia emocional podemos determinar mejor sus niveles de autoconciencia, autorregulación, y sus habilidades sociales, tal como su motivación y empatía. Jesús era un experto en la conciencia no sólo limitada a él mismo, sino que usaba el discernimiento para determinar el estado de otras personas. Esta palabra no es utilizada en este estudio, pero el discernimiento es bien importante sin lugar a dudas en la inteligencia emocional y las mujeres principalmente son muy eficaces en discernir intenciones a diferencia del hombre que somos más de acción.
En general las características que hemos estudiado nos permiten ser mejores personas y líderes para el beneficio de otras personas. Si Dios nos ha beneficiado con altos niveles en algunas áreas no hay duda que son un propósito para bendecir a otros. La aplicación de estas competencias o componentes de la inteligencia emocional sobre todo nos ayudan a ser mejores personas y mejores jefes.
Te invitamos a conocer más acerca nuestro PROGRAMA INTERNACIONAL EJECUTIVO DE LIDERAZGO – LOGOS